En el marco del proyecto educativo “Malvinas Futuro: “Soberanía, Memoria e Identidad Bonaerense”, ayer (3/4) en la Escuela Secundaria 2 de nuestra ciudad se llevo a cabo el acto de homenaje a la “perdida perla austral”.
La ceremonia, que contó con la presencia del ex Combatiente Jorge Rinaldi, fue presidida por el Intendente Municipal, Dr. Martín Randazzo y el Inspector Jefe Distrital profesor Fernando Jaime, a quienes acompañaban concejales, consejeros escolares y docentes, se inició con la entonación del Himno Nacional y la Marcha de Malvinas.
A continuación se dio lectura a un segmento del documento que establece el programa antes mencionado, suscripto por el titular de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense, Alberto Sileoni.
Luego se inició la serie de discursos, primero a cargo del profesor Jaime, quien en un pasaje de su alocución se refirió al cartel que marca la distancia entre este establecimiento y las Islas Malvinas, que fue luego descubierto y destacó que en la Región XXIII en este momento solo se instalaron tres referencias a dicha distancia y uno correspondía a la Escuela local.
Hubo un discurso a cargo de la docente Mariana Castro y del ex Combatiente Jorge Rinaldi.
Por último se descubrió el cartel que marca distancia y luego dicho cartel fue colocado en el acceso al establecimiento.
Las palabras de Mariana Castro:
Querida comunidad educativa, docentes, estudiantes, familias y ex combatientes presentes:
Hoy nos reunimos en esta fecha que nos duele, pero que también nos convoca a la memoria, la reflexión y el compromiso. 2 de abril. Malvinas. Dos palabras que en nuestra historia se han tejido con sacrificio, con valentía, con ausencias y con una herida que aun no ha cerrado.
Hace 43 años, un grupo de jóvenes argentinos, muchos de ellos apenas mayores que algunos de ustedes, fueron enviados a un conflicto que marco sus vidas para siempre. Fueron soldados que marcharon con la bandera en el pecho y con la esperanza de volver. Pero muchos no lo hicieron.
La Guerra de Malvinas no es solo un episodio bélico. Es el relato de una generación que sufrió el frio, el hambre y el miedo en un suelo que siempre sintieron propio. Es la historia de aquellos que regresaron, pero que a veces sintieron que nadie los esperaba. Es el eco de las voces que aun piden ser escuchadas.
Hoy, al recordar a los caídos, no solo los nombramos, sino que los hacemos presentes. Porque la memoria no solo un acto de nostalgia, es un compromiso con el futuro. Es preguntarnos qué significa Malvinas hoy. Es cuestionarnos que hacemos, como sociedad, para honrar a quienes lucharon, para reconocer a quienes volvieron y para seguir defendiendo, desde el dialogo y la paz, nuestra soberanía.
A ustedes, jóvenes, les toca la tarea de no olvidar. De aprender la historia, pero, sobre todo, de entenderla. De transformar la memoria en conciencia. Porque la soberanía no se defiende solo con armas, sino con educación, con justicia, con identidad y con la firme decisión de no repetir los errores del pasado.
Por eso, que este acto no sea solo un momento en el calendario. Que cada 2 de abril nos recuerde que la memoria no se apaga, que la gratitud no se olvida y que la lucha por la verdad y la justicia es un compromiso de cada uno de nosotros.
Por nuestros veteranos.
Por los que quedaron en las Islas.
Por los que volvieron con la guerra en la piel y en la memoria.
Por la Paz, por la Verdad, por la Justicia.
Porque las Malvinas fueron, son y serán argentinas.
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