


En una presentación realizada ante la Junta Electoral de la Provincia de Buenos Aires, la abogada Silvina Martínez impugnó las presuntas candidaturas testimoniales de más de una docena de intendentes que integran las listas de las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre.


La abogada solicitó que los candidatos hagan explícita su intención de asumir los cargos a los que se presentan y pidió que, en caso de constatarse una “simulación”, se tomen medidas “pertinentes” para preservar la integridad de las elecciones.
“Se ha difundido públicamente que numerosos intendentes bonaerenses en ejercicio se postulan como candidatos a diputados, senadores provinciales o concejales, sin vocación real de asumir los cargos en caso de resultar electos”, señala Martínez.
“Esto ha sido reflejado por múltiples medios de comunicación nacionales (LA NACION, Infobae, Ámbito, entre otros) los cuales afirman que ‘la mayoría de los jefes comunales no asumiría la banca”, sigue.
El escrito enlista a los intendentes-candidatos que, en caso de ser elegidos, podrían no asumir su banca, un acto que “lesiona el principio de buena fe electoral”, dice Martínez.
Por el peronismo son Mariano Cascallares (Almirante Brown), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Fabián Cagliardi (Berisso), Mario Secco (Ensenada), Guillermo Britos (Chivilcoy), Andrés Watson (Florencio Varela), Julio César Marini (Benito Juárez), Esteban Acerbo (Daireaux), Marcos Pisano (Bolívar), Pablo Zurro (Pehuajó), Fernando Espinoza (La Matanza), Mario Ishii (José C. Paz) y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas).
Por Somos Buenos Aires, la coalición que integran radicales, peronistas y gente de Pro, en la lista está Pablo Petrecca (Junín). Por el oficialismo, Guillermo Montenegro (Mar del Plata) y Diego Valenzuela (Tres de Febrero).
“Cabe destacar -advierte Martínez- que algunos candidatos (como Mayra Mendoza, Julio Zamora, Guillermo Montenegro, Diego Valenzuela, Pablo Petracca) sí han declarado públicamente su voluntad de asumir en caso de ser electos, lo que refuerza la sospecha sobre el resto de las postulaciones”.
La abogada señala en su escrito el caso de Juan José Mussi, jefe comunal de Berazategui, que hizo público que su candidatura será solo testimonial, y el de Secco, Watson, Espinoza, Nardini, Zurro, y el de la vicegobernadora Verónica Magario, quienes en distintas declaraciones dejaron entrever que no asumirían.
Martínez afirma que la inclusión de ellos en las listas responde a una estrategia político-electoral para “asegurar el control de sus distritos”.
“La mayoría de los candidatos mencionados son intendentes en ejercicio que han anunciado pública o tácitamente que no asumirán los cargos para los cuales se presentan”, afirma.
La abogada basa su presentación en el artículo 22 de la Ley Electoral de la Provincia de Buenos Aires -que permite presentar una objeción desde el día de la oficialización de la lista respectiva- y en lo dicho por la Cámara Nacional Electoral en 2009, cuando afirmó: “El principio de buena fe electoral exige que quienes se postulan lo hagan con intención efectiva de cumplir el mandato conferido por el voto popular”.
En aquel fallo de 2009, la Cámara rechazó las candidaturas testimoniales, pero dijo que no podía impedir candidaturas solo por la sospecha de que, llegado el momento, los postulantes no iban a asumir. Los candidatos cuestionados en 2009 eran Daniel Scioli y Sergio Massa.
Dentro del peronismo, fragmentado en al menos tres bloques, hay diferentes miradas sobre las candidaturas testimoniales. La expresidenta Cristina Kirchner rechaza la maniobra electoral y bajó a su sector la orden de que quienes se presenten en las listas deben asumir los cargos.