El pasado domingo (21/11) se disputaba un encuentro de futbol correspondiente al Torneo Oficial de la Liga Lapridense de Futbol, en cancha de Ingeniero Jorge Newbery el equipo local recibía a Deportivo Barracas.
A los cuatro minutos de iniciado el partido y bajo un sol pleno y una temperatura agobiante, fue sancionado un penal a favor del local, que el arquero visitante, Juan Lorca, detuvo y paso a ser un poco del héroe de ese momento.
Cuando se jugaban 17’ y los locales dominaban el juego, Lorca cayó y quedo inmóvil requiriéndose entonces la asistencia correspondiente. Los momentos siguientes fueron de angustia para todos los jugadores, las autoridades del encuentro y los muchos espectadores.
Cuando reaccionó, el jugador quería continuar, pero la presencia de una ambulancia del Hospital “Mariano Etchegaray” le hizo entender que debía ser asistido de otra forma y aceptó su traslado, en medio de la situación angustiante que vivían todos los presentes.
No llegaban noticias, hasta que casi al final del encuentro informaron que el trance había sido superado por el futbolista, quien debía permanecer por varias horas, para observación de su evolución.
Ayer (22/11), en horas del medio día nos encontramos con el protagonista del hecho y ya repuesto nos relató su experiencia y relató lo que le habían diagnosticado. Se trató de un “golpe de calor” y un cuadro de híper tensión, que le demandará alguna atención posterior.
Por ahora ya esta recuperado y solo queda como anécdota el mal momento vivido, pero cabe exigir un análisis mas profundo sobre la conveniencia de los horarios fijados para los encuentros de futbol en esta época del año, no solo de primera división sino también para otras divisiones. El domingo con una temperatura elevada, los encuentros de futbol femenino se iniciaron a las 12 horas, realmente en un momento inapropiado.
Las fotos muestran a Juan Lorca en el momento dramático del día domingo y la distensión del lunes.
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