


En General La Madrid, como en muchos pueblos del interior, la proximidad y los encuentros cotidianos entre todos los vecinos hacen que al paso del tiempo se vayan creando amistades perdurables.


Si a esa amistad le sumamos lazos afectivos, la partida de un convecino siempre impacta y las pérdidas son entonces mucho más dolorosas.
En la jornada del lunes (20/12) falleció Alfredo Chiste y quienes lo conocimos, lo tratamos y compartimos sus “preocupaciones” por conservar memoria de distintos aspectos de la vida pueblerina hoy acusamos el impacto de la triste noticia.
En sus 95 años fue un buen padre de familia, un empresario exitoso, un músico estudioso, un dirigente de diversas instituciones de la ciudad y por encima de todo eso, un buen vecino.
A quienes atesoramos en nuestra memoria hechos del pasado lugareño nos deja como legado el testimonio de innumerables artículos periodísticos con fechas, personajes y anécdotas que son parte de la historia local.
Pero además y seguramente es lo más trascendente, quedan su familia y amigos que honrarán su ejemplo de vida y a quienes deseamos puedan encontrar resignación para tan significativa pérdida.