Un hecho que enaltece la labor policial, tuvo lugar ayer por la tarde, sobre el kilómetro 773 de la ruta Nacional 22, en proximidades de Algarrobo. Allí, se produjo un accidente en el que se vieron involucrados un automóvil, una camioneta y un camión, los cuales circulaban todos en la misma dirección (en sentido Río Colorado-Bahía Blanca)
Uno de los vehículos involucrados fue una Renault Duster, al mando de Esteban Millazato, de 31 años, y en el que viajaban su esposa, María Agustina Galarza (31) y su pequeña hija de apenas siete meses, familia oriunda de Cipolletti. Cuando este intenta adelantarse al camión, es rozado por detrás por una camioneta Amarok, al mando de Tomás Pascual (de 26 años, originario de Azul), quien intentaba sobrepasar a ambos.
Tras el choque, el automóvil impacta contra la parte trasera del acoplado del vehículo mayor (al mando de Jorge Habitante, de 25 años, oriundo de Azul), sufriendo severos daños materiales y resultando la mujer acompañante con una fractura de tabique nasal y un corte en cuero cabelludo. De inmediato, arriba la asistencia tanto de ambulancia como de personal policial de Algarrobo.
Sin embargo, el hecho destacado en el marco del siniestro vial, se dio en el momento en el que la titular de la Dependencia policial de Algarrobo, Susana Madroñal -presente en el lugar- decide asistir a la beba. Si bien la pequeña había resultado ilesa, sí se encontraba muy asustada y llorando. Por ello, Madroñal -quien también tiene un bebé de siete meses- optó por darle el pecho para que se calmara, logrando su cometido.
Finalmente, la mamá de la beba fue trasladada al Hospital Penna para su mejor atención. El resto de los involucrados no sufrieron lesiones de consideración, pese a la espectacularidad del siniestro. El conductor de la Amarok quedó imputado por lesiones culposas, mientras que la causa está a cargo de la U.F.I.J N° 12 del Departamento Judicial de Bahía Blanca. InfoVillarino.com
“Fue conmovedor”, reveló la policía que amamantó a la beba
En situaciones límite se requiere mente fría y corazón caliente, además de la templanza para resolverlas. Eso fue lo que tuvo Susana Madroñal, oficial de Policía que, sin dudar, amamantó a una beba que había quedado involucrada en un accidente en el kilómetro 773 de la Ruta Nacional 22, en cercanías de Algarrobo.
En diálogo con LA BRÚJULA 24, reveló sus sensaciones tras lo ocurrido: “Estaba en mi domicilio, a punto de venir a la oficina porque soy la oficial a cargo de la dependencia policial. Surgió el llamado, ante la urgencia salimos con el personal y el resto de los recursos. Ni siquiera tuve tiempo de ponerme el uniforme”.
“Llegamos, preparados para todo tipo de situaciones y, a sabiendas de que había una bebé, hablé con el papá y por esas casualidades la vida se llama igual y tiene el mismo tiempo de vida que la mía. Me comentó que solo tomaba teta, por eso me ofrecí amamantarla, luego de higienizarme, porque estaba nerviosa y tenía hambre. Un personal de bomberos femenino se encargó de ayudarme a asistirla”, mencionó, en el programa “Bahía Hoy”.
Por último, admitió que “nunca viví una situación así, pero fue muy grato para todos y conmovedor, para mí como mamá, que estoy muy sensible. Gracias a Dios la niña estaba bien, pese a lo complicado del momento. Como policía y madre de tres hijas siempre imaginé esta situación y qué haría en ese momento. Me salió naturalmente tener a la criatura en el pecho y organizar el procedimiento”.
La Brújula 24. Fotos InfoVillarino.com y La Brújula 24
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