Para el reordenamiento de la campaña para las elecciones de octubre, la dirigencia radical de la Provincia de Buenos Aires, se reunió ayer (24/8) en el Comité Provincia, en la ciudad de La Plata.
Representantes de todas las secciones electorales bonaerenses acu dieron a la convocatoria que realizara el titular provincial Maximiliano Abad.
Mas de doscientos dirigentes estuvieron junto a la formula de Juntos para la Provincia de Buenos Aires, integrada por Néstor Grindetti y Miguel Fernández, con quienes analizaron los resultados registrados en las PASO y proyectaron las acciones de las próximas semanas.
Finalmente, se difundió el documento elaborado en el transcurso del encuentro:
Responsabilidad y sentido.
El país ha transitado unas elecciones primarias intensas, en el contexto de una crisis económica larga. La sociedad vive con estupor e indignación el triste espectáculo de un Presidente ausente y un “superministro de economía” carente de sentido de las prioridades.
Los argentinos/as pobres o de clase media que cotidianamente padecen las consecuencias de una gestión pública irresponsable, tienen sobrados motivos para la desafección política. Cada día los padecimientos se agigantan, el miedo a la inseguridad, los servicios públicos mal prestados, la incertidumbre laboral, la pérdida de valor de la moneda, etc.
Los argumentos son insuficientes frente a la ira y el enojo. La paciencia social se consume día a día.
Sin embargo, y aún en ese contexto doloroso. Muchos argentinos/as sacrifican horas de su vida para movilizar causas comunes, para impulsar proyectos económicos, para formarse, etc. Una Argentina tenaz, trabajadora, creativa se mueve en medio del desencanto.
Nuestra responsabilidad política es poner la energía en comprender este momento, y no responder de manera refleja. Las Paso han concluido, Juntos por el Cambio ha decidido mayoritariamente respaldar una visión que ha centrado su mensaje en el ORDEN como una necesidad sentida frente a un gobierno populista sin rumbo.
Ahora bien, el desgobierno actual no se lo supera con frases ocurrentes, insultos, descalificaciones, posicionamientos internacionales erráticos, o apelando al Tarot.
Quedan 2 meses hasta la elección general, nuestra tarea como radicales, entre la ensoñación pseudo-revolucionaria de un gobierno fracasado y el salto al vacío de
un experimento peligroso, es recuperar el sentido responsable de la acción pública.
La responsabilidad no se limita a tener programas y formar cuadros, necesitamos recuperar la cercanía con los votantes, entender sus angustias, reconocer los errores
que en estos 40 años de democracia se han acumulado, revisar nuestras prácticas, explicar las dificultades para ciertas transformaciones y asumir con valentía la necesidad de impulsar muchas que fueron postergadas.
Los argentinos/as estamos heridos en nuestra buena fe, hemos confiado en las instituciones democráticas y muchos seguimos confiando en ellas, pero en el despliegue cotidiano conviven buenas intenciones con gestiones erráticas, avances con retrocesos muy marcados.
La acción política no puede prescindir del estado de ánimo colectivo. Nuestro mensaje militante debe profundizar el sentido de orden que nuestra fuerza política ha instalado en el debate. Para salir de esta angustia, para recuperar nuestras expectativas, para poder proyectarnos, necesitamos volver a ser una sociedad con reglas de juego claras y equilibradas.
El orden que buscamos es reparador.
Las ideas que deben inspirar nuestro regreso al gobierno deben dialogar responsablemente con la agenda del futuro, pero sin dejar de hacernos cargo de este presente argentino con la piel expuesta por el maltrato al que ha sido sometida.
Soñamos y proyectamos el desarrollo nacional, en base al re-equilibrio territorial, multiplicando los jóvenes incluidos en las industrias tecnológicas, trabajamos para equilibrar nuestro presupuesto y darle previsibilidad a la actividad económica, somos conscientes de la necesidad de gestionar mejor nuestras infraestructuras y servicios públicos, etc.
Ahora bien, nada de eso será posible si no nos acercamos con afecto sincero a cada ciudadano/a para construir un vínculo que restablezca la confianza, que posibilite el esfuerzo y que acerque las instituciones de manera amable a su vida.
El 22 de Octubre Argentina decide si apuesta a la magia, la mentira o la simplificación engañosa, o a construir desde el orden y la paz.
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