


Había una vez, un señor que a sus seguidores les contaba que su llegada a General La Madrid fue cuando el lugar era solo campo y cielo. Que no había nada y todo lo debió hacer él.


Así fue engrosando la lista de obras que ya se habían hecho, pero que apelando a la poca memoria de sus interlocutores se les podía aplicar su copyright.
Pero, siempre hay un pero, algunos viejos memoriosos salieron a rebatir “propiedades” con datos y fechas y el relato cayó en desuso. De ahí que siempre conviene recordar que “los zorros saben por zorros, pero más saben por viejos”.
Y resulta que a pesar de todo, cada tanto alguien levanta la voz y reclama derechos que no les corresponden. Hace pocos días, cuando el debate en el Concejo Deliberante se estaba encaminando hacia un pase de “facturas” y chicanas, salieron a relucir las mil casas famosas, que se habrían hecho en alguna época.
Es un tema que se ha discutido muchas veces, a lo mejor sin que quien lo señalaba lo hubiera sabido, pero, que no sea cosa que, porque nadie se queja pase a ser una “verdad”, conviene señalar que es una gran mentira.
Si así no lo fuere y a riesgo de exponer nuestro honor y nuestro apego a la verdad, invitamos que nos hagan llegar el detalle de los barrios construidos y juntos hacemos la cuenta.
Ojo, que sea como con los chicos de feliz domingo, sin hacer trampas.
Desde esta misma columna, alguna vez abordé el tema y el desafío no fue aceptado, por eso redoblo la apuesta y espero.
Si no pueden llegar, aunque sea a seiscientas, que igual es mucho lo hecho, por favor el relato de las viviendas mándenlo a la papelera de reciclaje y nunca más tocamos el tema.
Hasta mañana

