


El secundario lo inicie en el “viejo” Instituto Incorporado, un colegio en el que si uno no aprobaba una materia tenía que rendirla en Azul, por eso de “incorporado”, dando motivo a que uno pensara en “llevarse” alguna fácil para poder viajar y pasar al menos un par de días en una ciudad muy distinta a nuestro pueblo. De esa época guardo gratos recuerdos por los docentes del establecimiento. No había profesores, todos eran “educadores” con vocación y ese plus que a las cosas le ponen quienes han elegido una carrera, la honran con el trabajo y por sobre todo con el ejemplo.


Lina A. Echaide de Gómez – la Señora “Chocha”- dictaba castellano, de ella guardo muy gratos recuerdos y poder conjugar algún verbo irregular o saber que la erre no es doble cuando va precedida de la letra ene.
Estaba por comenzar con esta columna y me vino todo eso a la memoria y entré en el análisis de los prefijos. Son unos “recursos” gramaticales que se colocan delante de una palabra para cambiar su significado original y así surgieron algunos necesarios para la ocasión: “increíble” “injustificable” y otro que al final creí conveniente no utilizarlo: “impresentables”.
Todo había empezado hace unos días, cuando quedó en evidencia que pese a la “irreprochable” tarea de vacunación realizada en el Hospital Municipal, se había decidido trasladar la tarea de supervisión a los miembros de una fracción política con afinidad al gobierno provincial. Se armó cierto revuelo, se intentó alguna justificación que resultó escasa y se guardó un silencio que aunque no quisieran hacia ruido.
Pero el tiempo pasaba e inexorablemente llegó el momento de blanquearlo. En la mañana del jueves los doctores Ramiro Borzi y Norma Alvarez Morello, de la Jefatura de Zona Sanitaria IX, a la que pertenece este distrito, llegaron a General La Madrid.
Como lo han destacado las crónicas de la visita, desayunaron, mantuvieron reuniones y por último ofrecieron una conferencia de prensa. Se brindó información sobre los próximos operativos de vacunación a toda la población, se reconoció que nuestro distrito es el que mejores resultados logró durante la pandemia dentro de la Región Sanitaria y luego se respondieron algunas preguntas.
Argumentando que los funcionarios debían viajar a Laprida y que allí los estaban esperando, apuraron la reunión sin poder evitar las preguntas lógicas de los periodistas presentes. Y es en esta circunstancia, que para expresar mis conclusiones voy a usar algunos prefijos. El primero “increíble” que se pretenda hacer creer que no hay un trasfondo político, que si se reconociera, uno tendría derecho a opinar pero que al fin habría que aceptar porque es una decisión de quienes gobiernan y listo. La segunda “injustificable” porque ¿cómo se explica? que en un problema de salud quienes los dirigen son profesionales de los números y no de la medicina y ahí paro para no seguir y aplicar otro, que aunque justo, pueda ser ofensivo.
Esto es un tema político y sería una cuestión de respeto hacia toda la gente de General La Madrid, reconocerlo, aunque digan que es un operativo conjunto con las autoridades sanitarias del distrito, y por otro lado dejar en claro de quien será la responsabilidad si algo sale mal. No sea cosa que surja cualquier inconveniente y como en Olavarría quieran eludir las costas del juicio popular.
Tienen facultades para hacer lo que quieran, pero siempre por derecha y sin querer esconder nada, porque nosotros somos gente grande y deberíamos ser respetados.
Hasta mañana.

