Muchos años atrás era común el hilo de cáñamo, que mas tarde, fue remplazado por cuerdas plásticas de espesor uniforme y costos inferiores.
Con el paso del tiempo vine a enterarme que uno de los motivos por el cual resultaba difícil conseguir el hilo de cáñamo era su origen, porque se extrae del tallo de la planta de cannabis y su cultivo estaba prohibido.
Otro día, por la difusión que se dio en nuestro medio a las propiedades del cannabis y las experiencias que se venían haciendo en busca de alivio para ciertas patologías, comprendí su valor y adherí a las campañas que se iniciaron, precisamente desde nuestro Concejo Deliberante.
Lo demás es historia conocida, mejor dicho es una historia conocida y protagonizada por la gente de La Madrid. Primero con una reunión realizada en el Salón Blanco del Municipio, con la presencia de la Familia Morante. Mas tarde con las jornadas que se llevaron a cabo en el Polideportivo y tuvieron el apoyo de toda la comunidad y mas acá en el tiempo, los multitudinarios encuentros, como el concretado para la foto de tapa de la Revista Viva.
Para nosotros Cannabis y Marcelo son sinónimos o mejor dicho, el Dr. Marcelo Morante fue hasta el lugar del mundo donde se había desarrollado el tema, lo estudió, lo difundió y tuvo el valor de imponerlo pese a los riesgos que en aquel momento existían. Fue gestor de lo legislado a nivel nacional y hoy es autoridad en la materia, acá y en cualquier parte.
Por eso, cuando hace algunas semanas se le rindió un merecido homenaje, sus vecinos, los que lo conocen desde siempre, estuvieron para acompañarlo con gestos de admiración y respeto.
Hace pocos días, en el Concejo Deliberante se presentó un proyecto de Ordenanza para la creación de “Cannabis La Madrid SAPEM”, fuimos en cierta forma sorprendidos. Resulta que esta entidad será la que tendrá a su cargo el manejo del emprendimiento instalado en el Parque Industrial por parte del Municipio.
Nadie explicó nada del proyecto, los concejales lo han tratado en comisión y mañana, a la hora de la siesta, van a emitir dictamen y lo aprobarán, sin que los vecinos de General La Madrid se enteren de que se trata.
Legalmente, seguro que está perfecto. Administrativamente, como dicen los chicos, ponele. Pero si siempre hemos estado interesados y cuando nos convocaron, aunque solo fuera para una foto de Clarín, estuvimos ¿no se podría haber llamado a una reunión y al que fuera, explicarle que se proponen hacer?
Cuando necesitan mostrar que “somos muchos” nos llaman y nosotros vamos, pero después, como si ya no hiciéramos falta, nadie nos dice nada.
Lo he repetido en numerosas oportunidades, hay un órgano oficial. Mal llamado de prensa, porque en realidad es un órgano de propaganda, que bien podría haber sido utilizado, aunque mas no fuera esta vez, para informarnos de Cannabis La Madrid SAPEM, y si no querían utilizar el medio para informar, recurrir a los otros medios, los que mantienen con pautas y los independientes. Si todos hemos estado siempre, bien podrían habernos informado para que la gente del pueblo sepa que es lo que se proponen.
Y que quede en claro, nadie duda de la viabilidad del proyecto, su encuadre legal y como decían, generador de múltiples puestos de trabajo, lo cuestionable es el silencio en el que se ha desarrollado el proyecto y la sensación de ser considerados de la forma en que Antonio Gasalla definía a los elementos que se usan y luego, cuando han cumplido una importante función, se los desecha.
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